viernes, 19 de noviembre de 2010

De nostalgias


La nostálgia intenta siempre acompañar los regresos, y hasta la ciudad se envolvió en llanto el día que tuve que decir adiós. Como muestra de solaridad también aquí al llegar me recibió la lluvia persistente y fría, pero ésta ya me es familiar desde hace tiempo. Ella, cómo nó, se portó como una perfecta anfitriona a pesar de sufrir heridas desordenadas. ¡Pobres calles que muestran fastidiadas sus interiores expuestos a la mirada de todos! No por eso me ofreció menos de lo que yo esperaba. Sólo lo rápido de los días siguió tenaz su recorrido hasta llegar al de ayer. ¡La vida, que sigue con prisas y sin detenerse! ¡qué corto se hace el tiempo cuando queremos que no acelere, cuando queremos obligarle a andar a nuestro aire!



Después empezó de nuevo a contar la rutina ....

3 comentarios:

Annick dijo...

Pero tienes la suerte de hacer ese ir e venir a menudo ; mas quisiera yo hacer lo mismo .
Ahora estoy en Madrid , cuidando de mis nietos ( sus padres de viaje ), pero vuelvo el 24 a Málaga , a buscar un poco de sol .Que aqui hace un frío que pela !

Besos desde Madrid.

Javier Muñiz dijo...

Hola, bello blog,preciosas entradas, te encontré en un blog común, si te gusta la poesía te invito al mio,será un placer,es,
http://ligerodeequipaje1875.blogspot.com/
muchas gracias, buen sábado,besos

Nómada planetario dijo...

El tiempo del reloj tiene otro ritmo bien distinto del biológico. Por lo menos disfruta del contraste que tienes a mano.
Saludos desde una mañana gris