jueves, 6 de marzo de 2014

Ayer Martes en Amsterdam


Una manera diferente de aparcar una bicicleta
 

2 comentarios:

Marcos dijo...

Las ciudades con canales siempre me han parecido algo mágicas.

ANTONIO CAMPILLO dijo...

¡Ay! Amsterdam, la belleza de una ciudad sólida y líquida. Todavía tengo pendiente lugares de sus calles, cervezas en sus terrazas y paseos entre la libertad que se respira. Los aparcamientos siempre deben estar ocupados pero de verdaderos móviles tan agradables como el entorno que generan.

Un cariñoso abrazo, querida amiga Pilar.